Dragones y changarras: Zlata lisica

O lo que es lo mismo en la lengua de Cervantes, "zorra de oro". Dicho así queda un poco feo para una competición deportiva femenina, y de primer nivel. Estoy hablando de la prueba de la Copa del Mundo femenina de esquí alpino que se celebra en Eslovenia. Se organiza en Maribor, concretamente en las afueras, en Pohorje. Pohorje es una pequeña cordillera en el noroeste del país, muy famosa para los amantes del esquí. No lo he dicho por aquí, pero este año es el que más está nevando desde que vivo aquí. Aún así, sigo sin haber esquiado. Al menos ayer me acerqué más a este mundo tan desconocido para mí y fuimos con unos amigos a ver la mencionada prueba. Es una más de las que componen la lucha por el Globo de Cristal que corona a la campeona y en esta edición llegaba a la número 49. Salimos de buena mañana y decidimos dejar el coche en Maribor. Llevaba más de un año sin poner un pie allí. Y es que en todo 2012, a pesar de ser Capital Europea de la Cultura, no me digné a ir. Una vez aparcado el vehículo cogimos desde la estación de autobuses (de lujo comparada con la de Liubliana) uno de los servicios especiales y gratuitos con motivo del evento. Eso se puso hasta las cencerretas. Después de un largo trayecto nos dirigimos con nuestras entradas, de cuatro euros, a la pista. Cuando llegamos ya había empezado la primera manga, pero justo pudimos ver la actuación de Tina Maze, la gran figura deportiva eslovena del momento y más que probable ganadora del día.

Por supuesto, paramos en Trojane

Llegados a este punto haré un inciso para explicar un poco más sobre el funcionamiento de la competición para los que, como yo hasta haber investigado un poco, no tienen ni idea. El sábado se disputaba la prueba de gigante, la que yo presencié, y hoy domingo se trataba del eslalon. La pista en las que se realiza es la misma, lo que cambia es el tipo de puertas que marcan el trazado. Y ambas tienen un par de mangas en las que se computa el tiempo de las dos y gana, obviamente, la que mejor marca haga. Más o menos en las distintas especialidades (hay hasta otras tres más) compiten las mismas chicas. Y cada especialidad tiene un mini Globo de Cristal para la mejor esquiadora de dicha especialidad y uno más, el más importante, para la mejor de todas las pruebas combinadas. Y después de este coñazo puedo continuar donde lo había dejado. Tina Maze, toda una celebridad en Eslovenia y casi con toda seguridad ganadora de su primer Globo de Cristal esta temporada, marcó el mejor tiempo de la primera manga. Incluso hasta hayáis oído hablar de ella. Pero de la que seguro que habréis oído hablar es de Lindsay Vonn, la gran dominadora del esquí femenino en los últimos años y guapísima. En la primera manga solo pudo quedar tercera. Esta primera manga la presenciamos al lado de la meta. La verdad es que no se ve mucho. Es uno de esos deportes que se ve mejor en casita, a no ser que te quieras gastar los sesenta euros que, en este caso, cuesta la tribuna. Además había mucha gente. Los datos que he escuchado hablan de diez mil personas, pero a mí me parecen demasiadas. Entre manga y manga hay una gran pausa, en la cual nos zampamos una "pleskavica" (la hamburguesa balcánica) y nos dispusimos a enfrentarnos a la pendiente. Amigos, no es nada fácil caminar por cuestas de más del 50 % de pendiente repletas de nieve. Y cansa. Mucho. Además de las frecuentes caídas. Al menos las vistas hacia abajo son espectaculares, y en este caso más, con Maribor al fondo. Arriba nos quedamos para ver a las primeras esquiadoras de la segunda manga, para acto seguido bajar un poco para ver el final. Pero no bajamos hasta abajo, había mucha más gente que antes y hubiera sido imposible llegar a un lugar desde el que ver la pantalla. Y si no ves la pantalla con la información te enteras de poco. Por las reacciones del público y lo poco que se escuchaba al speaker nos pudimos enterar de cómo Lindsay Vonn marcaba el mejor tiempo y la última en tomar la salida, Tina Maze, se quedaba a las puertas de la victoria, por tan solo ocho centésimas. Increíble fue el silencio del público cuando Maze cruzó la meta. Fue un poco triste para los eslovenos, pero no sé dónde está el problema, porque con ese resultado ganaba el mini Globo de Cristal del gigante, siendo éste su primero. Además, ya había ganado esta prueba en un par de ocasiones. De todos modos, esta gente es muy competitiva y hoy se ha podido quitar la espinita triunfando, para éxtasis nacional, en el eslalon, y ahí hemos estado pegados al televisor para verlo. No es que se vaya a convertir en mi deporte favorito, pero no deja de ser interesante.